A partir de la selección de tres barrios del municipio de Madrid con características diferenciadas: un barrio de clase media, un barrio céntrico y en proceso de cambio y un barrio vulnerable, este estudio analiza la diversidad y complejidad de los lazos y apegos en el espacio local haciendo uso de metodología cualitativa. Las características diferenciales de cada uno de estos barrios permiten examinar las diversas manifestaciones del sentido de pertenencia y la manera en que los residentes desarrollan conexiones significativas con su entorno local. Se presta especial atención a las dinámicas de interacción social, el apoyo local, la solidaridad vecinal, las formas en que los individuos construyen su identidad y encuentran estabilidad a través de estos vínculos y, también, a la manera en que el liderazgo femenino afecta a estos procesos. Este análisis permite comprender mejor cómo las personas, a pesar de la creciente individualización y los cambios en las estructuras sociales tradicionales, y en un contexto de cambio e incertidumbre permanente, aún valoran los lazos comunitarios más o menos intensos que les proporcionan un cierto sentido de anclaje.