Se propone una nueva metodología para estimar una curva Neo-Keynesiana "híbrida" (NKPC) que incluye presiones de demanda provenientes de desequilibrios en tres diferentes mercados: (1) monetarios y financieros, (2) internacional y (3) trabajo. Contrastes econométricos basados en datos chilenos indican que esta especificación es superior a una curva NKPC tradicional, que incluye una única variable para capturar presiones de demanda. Es más, la consideración de relaciones de cointegración en los mercados monetario y laboral resulta particularmente útil para predecir la dinámica de la inflación en comparación con especificaciones alternativas basadas en medidas estándar de fluctuaciones de producción